Al cabo de pocos meses, pese a su timidez todavía muy arraigada, Ulises tuvo ya la suficiente confianza con aquella familia como para entrar en la cocina, situada detrás de de la barra y levantar la tapa de la cacerola donde se estaba cociendo cualquier guiso. La señora Roseta le explicaba lo que iban a comer ese día .En la olla hervía un espinazo ,un hueso de jamón el tocino y los garbanzos. Después le añadiría las patatas y media morcilla de sangre. En fuego aparte se estaba cociendo la col mientras su hija Martina hacía un picadillo de tomate con cebolla sal aceite y una guindilla roja.....
...Después de las enciclopedia, se fueron las novelas y tras ellas los libros de ídiomas y los técnicos, como si guardaran en la huida un.....
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